Según estudios epidemiológicos, entre el 10 y el 30 % de la población sufre brotes recurrentes de herpes labial. La zona en la que se manifiesta suele ser la misma en cada individuo y afecta al labio superior o inferior, puede ir acompañado también de afección en otro sitio de la cara, aunque se trata de infecciones más esporádicas.
Por otro lado, la frecuencia con la que se producen es muy variable. Algunos pacientes lo padecen durante algunos años y no vuelven a tener recurrencias. En otros, lo hacen con mucha regularidad durante un periodo y solo lo manifiestan ocasionalmente después.
Ante tales circunstancias, resulta interesante conocer cuáles pueden ser los factores desencadenantes de la recurrencia del herpes labial, posibles complicaciones que pueden acompañarlo, así como algunas medidas preventivas a adoptar.
Factores desencadenantes de la recurrencia del herpes labial
Una de las características del herpes labial recurrente es el hecho de que una gran cantidad de factores pueden inducir una reactivación viral a nivel de los ganglios linfáticos seguida de una recurrencia clínica.
En ocasiones, se puede encontrar herpes labial recurrente grave después de la extracción de un diente o después de una inyección con fines de relleno labial. Asimismo, los diferentes factores que pueden desencadenar una recurrencia herpética son:
Fiebre originada por algún proceso infeccioso.
De origen hormonal por menstruación (herpes catamenial) o embarazo
Por infecciones como gripe, erisipela (enfermedad infecciosa bacteriana que afecta a la piel y al tejido subcutáneo), meningitis, neumonía, etc.
Por situaciones de inmunosupresión ya sea de origen iatrogénico, por cáncer, quimioterapia o fármacos en el contexto de un trasplante de órganos.
Psicógeno por estrés, fatiga o factores psicológicos.
Por causas físicas, como la radiación ultravioleta (herpes solar).
Traumático por contacto directo, quemaduras o cortes.
Factores quirúrgicos, entre ellos, dentales o cosméticos.
A nivel fisiológico del organismo, los factores locales provocan una señal axonal retrógrada al ganglio nervioso, lo que induce la reactivación viral. Sin embargo, los factores sistémicos probablemente actúan directamente sobre el virus en la fase latente a nivel de los ganglios linfáticos o mediante la inhibición parcial de la inmunidad humoral o celular.
Otras posibles complicaciones del herpes
Además de algunas graves como la encefalitis (infección cerebral) o queratitis (infección ocular), existen estudios para conocer otras complicaciones.
Entre otros, la posible relación entre la infección por herpes virus y la enfermedad periodontal ha suscitado la atención de muchos investigadores, ya que se ha encontrado evidencia suficiente como para atribuir a determinados herpes virus un papel importante en la etiología y la patogénesis de los procesos destructivos del periodonto.
Así, autores como Contreras & Slots, entre otros, han intentado esclarecer esta posible asociación y han escrito cinco mecanismos que pueden explicar el carácter periodontopatógeno de los herpes virus:
Los herpes virus tienen la capacidad de causar daños citopáticos en fibroblastos, queratinocitos, células endoteliales e inflamatorias.
Estos virus tienen la capacidad de actuar negativamente sobre las células de defensa del huésped, predisponiendo al sujeto a una sobreinfección bacteriana.
La infección gingival por herpes virus puede facilitar la colonización subgingival por bacterias periodontopatógenas.
Las infecciones virales podrían alterar la respuesta inflamatoria, aumentando la producción de mediadores proinflamatorios.
Por último, pueden producir daño directo sobre los tejidos, como consecuencia de la respuesta inmunopatológica a las células infectadas por el virus.
Por todo ello, dichos autores concluyen que la frecuencia con la que se encuentran virus en lesiones periodontales, junto con el conocimiento de su naturaleza infecciosa sobre las células encargadas del proceso inflamatorio, así como del regenerativo, hacen posible la creencia de que exista una periodontitis asociada a herpes virus.
Medidas preventivas para el herpes labial recurrente
Se pueden implementar diferentes medidas preventivas para contrarrestar el herpes labial recurrente, respondiendo a estímulos internos o externos.
Las recurrencias del herpes labial fotoinducido se pueden inhibir en aproximadamente el 90% de los pacientes, combinando fotoprotección externa (SPF > 20) y tratamiento antiviral profiláctico comenzando 12 horas antes de la exposición solar en caso necesario. También se ha demostrado en un estudio realizado, que la fotoprotección externa por sí sola es eficaz reduciendo el número de recurrencias herpéticas inducidas experimentalmente por rayos ultravioleta en un 71 % en el grupo tratado en comparación con 3 % en el grupo de placebo.
El herpes labial recurrente también puede aparecer después de procedimientos dentales. Las recurrencias son inducidas por un traumatismo labial o por irritación de los nervios durante la anestesia. La experiencia que reflejan algunos estudios muestra que los episodios graves relacionados con procedimientos dentales pueden evitarse eficazmente administrando un tratamiento antiviral oral dos días antes de la visita, siempre bajo supervisión y pauta médica.
Una cirugía que afecta a la raíz del trigémino u otros procedimientos, neoquirúrgicos son un factor de riesgo para inducir recurrencias herpéticas, particularmente en pacientes que se sabe que tienen herpes labial recurrente. A pesar de ello, actualmente no existen estudios controlados sobre la eficacia profiláctica de los antivirales y las indicaciones precisas de los medicamentos en este tipo de procedimientos.
Los pacientes que se someten a procedimientos faciales dermocosméticos, incluidas exfoliaciones químicas medias y profundas, dermoabrasiones, rejuvenecimiento con láser o rellenos de arrugas, también corren el riesgo de experimentar recurrencias herpéticas que pueden ser muy graves y extensas. Por ello, en pacientes con o sin herpes labial recurrente, se considera oportuno consultar con el médico la conveniencia de un tratamiento profiláctico.
De las distintas situaciones mencionadas, las recurrencias del herpes labial inducido por la luz solar suelen ser habituales. Éstas se pueden prevenir utilizando un bálsamo hidratante de uso diario que mantenga en buen estado los labios y que le aporte la protección adecuada frente a la radiación, como por ejemplo con un filtro UV con SPF 30. Este tipo de productos se suele utilizar aplicándolo de 3 a 6 veces al día sobre los labios, cuando se exponen a factores desencadenantes como la luz solar.
En algunas ocasiones, muchos pacientes no requieren utilizar ningún tratamiento, porque la enfermedad es autolimitada. Sin embargo, para las personas con recurrencias frecuentes del herpes labial, la aplicación de productos en forma de bálsamo elaborados a base de sales de zinc y aceites de origen natural, permiten tratar los síntomas en las cuatro fases del herpes labial. Así, a la vez que acortan su tiempo de duración lo previenen, bloqueando los factores que lo desencadenan, al contar en su composición con un filtro de protección solar. Son capaces de disminuir la probabilidad de brotes recurrentes y contribuyen a abordar el tratamiento de la infección. Además, algunos son incluso transparentes y discretos para no resaltar el herpes labial y se adaptan a la extensión de la lesión sin escocer sobre las heridas abiertas.
En cualquier caso, es conveniente consultar con un profesional sanitario como el médico o farmacéutico, que nos aporte los consejos adecuados y nos ayude a valorar la mejor opción tanto para su prevención como para su tratamiento.
Rooney, J.F.; Bryson, Y. Mannix, M.L.; y col. Prevención del herpes labial inducido por luz ultravioleta mediante protector solar. Lancet, 1991, 338: 419-422. [Acceso: 28 de enero de 2024]. Disponible en: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/1683420/
