Posiblemente lo más importante para cualquier ser humano es su capacidad para almacenar experiencias y poder beneficiarse de dichas experiencias en su actuación futura. El engranaje y los mecanismos que rigen el funcionamiento de este colosal proceso psicológico funcionan con tal grado de perfección que la persona sana apenas es consciente de que todas sus acciones y todas sus comunicaciones verbales dependen del correcto funcionamiento de su memoria.
Sin embargo, cuando falla la memoria, ya sea de manera circunstancial y momentánea o ya sea de manera permanente, el individuo se da cuenta de su importancia. En determinadas situaciones juega un papel crucial en nuestras vidas, ya que gracias a ella podemos conservar conocimientos que nos ayudan a desenvolvernos de manera correcta en nuestro día a día. Por ejemplo, en el caso de los estudiantes, la memoria es necesaria para retener una importante cantidad de información de cara a los exámenes.
En este contexto, resulta interesante conocer qué es la memoria, para qué sirve, la importancia de sus funciones, así como la existencia de algunos complementos alimenticios que pueden ayudar a mantenerla.
¿Qué es la memoria?
La memoria es un proceso psicológico que sirve para almacenar información codificada. Dicha información puede ser recuperada, unas veces de forma voluntaria y consciente y otras de manera involuntaria.
Asimismo, la memoria consiste en la capacidad de adquirir, almacenar y recuperar la información. Somos quienes somos gracias a lo que aprendemos y recordamos. Sin memoria no seríamos capaces de percibir, aprender o pensar, no podríamos expresar nuestras ideas y no tendríamos una identidad personal.
Aunque en ocasiones el funcionamiento de la memoria no sea totalmente perfecto, lo cierto es que, de manera general, cumple su función bastante bien en situaciones normales y en personas sanas. Así, su misión fundamental no es otra que codificar, registrar y recuperar grandes cantidades de información que resultan fundamentales para la adaptación del individuo al medio.
¿Para qué sirve la memoria?
La función principal de la memoria es proporcionar a los seres humanos los conocimientos necesarios para comprender el mundo en el que viven. La memoria conserva y reelabora los recuerdos en función del presente y actualiza nuestras ideas, planes y habilidades en un mundo cambiante.
Existe la memoria implícita, que comprende los hábitos, la sensibilización y condicionamiento clásico, y también las destrezas perceptivas y motoras, como andar en bicicleta. Además, está la memoria explícita que incluye los recuerdos conscientes sobre personas, lugares, objetos y acontecimientos.
Así, respecto a la reflexión sobre “para qué sirve la memoria”, es importante conocer que los seres humanos construimos y renovamos nuestra representación del mundo, a partir de tres procesos cognitivos fundamentales: la percepción, el aprendizaje y la memoria. El aprendizaje consiste en adquirir conocimientos sobre el mundo a través de la experiencia, y la memoria es la retención y evocación de esos conocimientos.
En este sentido, la memoria tiene tres funciones básicas: recoge nueva información, organiza la información para que tenga un significado y la recupera cuando necesita recordar algo. El recuerdo de rostros, datos, hechos o conocimientos consta de tres etapas: codificación, almacenamiento y recuperación.
Codificación. Es la transformación de los estímulos en una representación mental. En esta fase, la atención es muy importante por la dirección (selectividad) y la intensidad (esfuerzo) con que se procesan los estímulos.
Almacenamiento. Consiste en retener los datos en la memoria para utilizarlos posteriormente. La organización de la información se realiza mediante esquemas, unidades estructuradas de conocimiento que reúnen conceptos, categorías y relaciones, formando conjuntos de conocimientos.
Recuperación. Es la forma en que las personas acceden a la información almacenada en su memoria. Puede ser espontánea, cuando los recuerdos surgen de forma casual, o voluntaria, como es el caso de la preparación para un examen.
Importancia de las funciones de la memoria
De manera general, al referirnos a las funciones de la memoria, cabe esperar que, desde una visión más amplia, se hable de las funciones del cerebro. Éstas son tanto las funciones mentales globales, tales como la conciencia, las intelectuales, la energía y los impulsos.
Por un lado, las funciones cognitivas superiores son funciones mentales específicas, incluyendo conductas complejas con propósitos finales tales como la toma de decisiones, el pensamiento abstracto, la planificación y la realización de planes, la flexibilidad mental, y decidir cuál es el comportamiento adecuado en función de las circunstancias; que a menudo se denominan funciones ejecutivas. En ella se incluyen: funciones de abstracción y organización de ideas; manejo del tiempo, introspección y juicio; formación de conceptos, categorización y flexibilidad cognitiva. Según la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), la función cognitiva engloba varios dominios, incluyendo memoria, atención (concentración), lucidez mental, aprendizaje, inteligencia, lenguaje y resolución de problemas.
Por otro lado, las funciones intelectuales son las funciones mentales generales necesarias para comprender e integrar de forma constructiva las diferentes funciones mentales, incluyendo todas las funciones cognitivas y su desarrollo a lo largo del ciclo vital.
En concreto, la memoriaes una función mentalespecífica relacionada con el registro y almacenamiento de información, así como su recuperación, cuando es necesario. Incluye funciones de la memoria a corto y a largo plazo, memoria inmediata, reciente y remota.
Complementos alimenticios para la memoria
Resulta importante para mantener un buen desarrollo y un óptimo estado de salud seguir una dieta variada y adecuada en las distintas etapas de la vida. En concreto, el desarrollo del sistema nervioso es un proceso complejo en el que participan numerosos nutrientes esenciales. Por ello, incluso deficiencias leves son capaces de inducir alteraciones en su desarrollo o en su funcionamiento. Diversos estudiosos relacionan la “dieta saludable” con el mantenimiento de una adecuada función cognitiva, tanto en sujetos jóvenes como ancianos; lo que incide en un buen mantenimiento de las funciones mentales entre las que se encuentra la memoria.
Así, una nutrición adecuada puede favorecer el desarrollo cerebral, incluso una mayor capacidad de aprendizaje y, a su vez, de la memoria. Una dieta equilibrada, variada y adecuada al estado fisiopatológico es vital para mantener un adecuado estado de salud, una adecuada función cognitiva y ayudar al correcto funcionamiento del cerebro y de la conservación de la memoria.
Algunos nutrientes con un papel destacado sobre el correcto desarrollo de nuestro cerebro y la función cognitiva son las vitaminas (como algunas vitaminas del grupo B o C), minerales o grasas, entre otros. En este sentido, existen complementos alimenticios que contribuyen a una buena memoria y una función psicológica normal que contienen en su composición ingredientes como Ginkgo biloba, glutamina, fosfatidilserina y vitaminas del grupo B (vitamina B1, B12 y B9). Para obtener un resultado óptimo, debe tomarse un comprimido al día. Aunque podemos beneficiarnos de sus propiedades en cualquier circunstancia, cierto es que resultan de vital importancia en determinadas épocas, como por ejemplo en época de exámenes.
Es importante tener en cuenta que los complementos no deben utilizarse como sustitutos de una dieta variada y equilibrada, ni de un estilo de vida saludable. Por ello, siempre que tengas una situación particular en la que la memoria sea esencial como es el caso de los exámenes, puedes consultar a un profesional sanitario como el farmacéutico, él te indicará el complemento alimenticio adecuado para estos casos, así como las pautas a seguir para obtener el mejor rendimiento de su utilización.
Muñoz Navarro, B. Complementos alimenticios relacionados con los estados de cansancio y fatiga, función cognitiva e intelectual y memoria, y función visual: composición, etiquetado y adecuación a la legislación vigente. Tesis Doctoral, Facultad de Farmacia, Departamento de Nutrición y Bromatología II, Universidad Complutense de Madrid. 2016. [Acceso: 29 de marzo de 2024]. Disponible en: https://docta.ucm.es/rest/api/core/bitstreams/ef0a2d0f-eb6f-4863-bdc4-59d64f6b0b9a/content
