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08/11/2024

Dismenorrea, ¿Qué es y cuáles son las soluciones?

La menstruación dolorosa o dismenorrea es la condición ginecológica más frecuente que afecta aproximadamente a un 45-90% de las mujeres en edad reproductiva. A pesar de su alta prevalencia, todavía no existe un entendimiento completo sobre su fisiopatología y su relación con otros tipos de síndromes dolorosos que se producen en torno a los días de sangrado.

En muchas mujeres en período de menstruación, la dismenorrea tiene un impacto significativo en su calidad de vida durante varios días cada mes. Es causa de ausencia a actividades escolares o laborales en un 33 a 50% de las mujeres que lo padecen.

Dada la alta prevalencia de la dismenorrea entre la población femenina, resulta interesante conocer qué es, qué tipos de dismenorrea existen y cuáles son los síntomas más habituales, así como los recursos útiles para combatirlos.

¿Qué es la dismenorrea?


El término dismenorrea, etimológicamente hablando, procede del griego (dys: difícil, mens: mes y rhoia: flujo), cuyo sentido literal es “flujo menstrual difícil”, aunque en la terminología clínica se refiere a periodos menstruales dolorosos. Es el dolor pélvico de origen ginecológico que se presenta durante el periodo menstrual, siendo también descrito como calambres, cólicos menstruales o menstruación dolorosa. El dolor, de características muy variadas, puede preceder o acompañar al flujo menstrual. Además, puede ser en ocasiones tan incapacitante que afecte negativamente a la actividad cotidiana de la mujer, condicionándole en el ámbito social, profesional y personal.

Estudios clínicos y experimentales han identificado que la producción de prostaglandinas uterinas es la razón fisiológica para la génesis de la dismenorrea. Durante la descamación del endometrio, las células endometriales liberan prostaglandinas en el momento en que se da inicio la menstruación. Las pacientes con dismenorrea severa tienen niveles más altos de prostaglandinas en el líquido menstrual, los cuales son más altos durante los dos primeros días de la menstruación. El dolor de la dismenorrea se debe así a la liberación excesiva de prostaglandinas, que provoca una hipercontractilidad del miometrio (capa muscular del útero situada entre el perimetrio, por fuera, y el endometrio, por dentro) y una isquemia endometrial por vasoconstricción arteriolar, induciendo a la vez una hipersensibilidad de las fibras nerviosas.

Tipos de dismenorrea


Existen dos tipos de dismenorrea, primaria y secundaria. A continuación, se detallan las diferencias entre ambas:

La dismenorrea primaria es aquella en la que no se encuentra ninguna anomalía o enfermedad pélvica y no se vincula a ninguna patología orgánica específica. Se denomina también dismenorrea esencial o funcional. Característicamente, aparece cuando se instauran los ciclos ovulatorios, lo que suele ocurrir entre 6 y 12 meses después de la menarquia (día en el cual se produce el primer episodio de sangrado del útero, de origen menstrual, o primera hemorragia menstrual de la mujer). Suele estar también presente si el sangrado es abundante y con coágulos, aunque no haya ovulación. El dolor puede ser ocasional en alguno de los ciclos, o constante en cada ciclo. 
Este tipo de dismenorrea es la más frecuente y aparece por la propia contracción de la matriz, no se puede evitar ni prevenir, es común entre los 14 y los 25 años y mejora con el paso del tiempo.

Se denomina dismenorrea secundaria al dolor menstrual que se produce debido a una anomalía o enfermedad pélvica específica y en el que en la exploración de la mujer se suele identificar alguna patología orgánica. Sus principales causas están relacionadas con alteraciones pélvicas ginecológicas, pero también puede deberse alteraciones en otros sistemas como el urológico, el gastrointestinal o el músculo esquelético. Puede ser causada por infecciones, quistes de ovario o endometriosis (cuando el tejido endometrial se sitúa fuera de la matriz, normalmente en el abdomen). También se han descrito causas psicógenas (enfermedad o trastorno producido por factores psicológicos o emocionales).

Este tipo de dismenorrea aparece tardíamente en la vida reproductiva de la mujer y, a veces, después de años de ausencia de dolor menstrual. Sin embargo, existe una excepción en caso de obstrucción de las vías genitales, en el que el dolor se presenta desde las primeras menstruaciones y requiere un diagnóstico diferencial con la dismenorrea primaria.  A diferencia de ésta, el dolor es más continuo, persistente y sordo, aumentando progresivamente durante los días del periodo menstrual, y dura de 2 a 3 días.


¿Cuáles son los síntomas más habituales de la dismenorrea?


El dolor de la dismenorrea suele aparecer en la parte baja del vientre, cadera, espalda y muslos. Puede venir acompañado de náuseas, vómitos, dolor de cabeza, estreñimiento o diarrea.

En la dismenorrea primaria el dolor suele aparecer en abdomen inferior o pélvico, frecuentemente se inicia con el flujo menstrual y dura entre 48 a 72 horas. En cambio, en la dismenorrea secundaria, las pacientes pueden referir cambios en el momento de inicio del dolor durante el ciclo menstrual o en la intensidad de este. Generalmente están presentes también otros síntomas ginecológicos como dispareunia (relaciones sexuales dolorosas), sangrado poscoital y menorragia (sangrado menstrual muy abundante).

Recursos útiles para mitigar los síntomas


En las dismenorreas es importante aportar inicialmente medidas generales no farmacológicas, o consejos útiles para aliviar el dolor como, por ejemplo:

  • Aplicar calor local, con paños calientes en la región del vientre que molesta. Pueden ser útiles una manta o baños con agua templada.
  • Buscar una postura cómoda, por ejemplo, tumbada de lado con las piernas flexionadas.
  • Realizar actividad física regular (no durante el episodio de dolor) o ejercicio suave como pasear, nadar o montar en bicicleta. El reposo prolongado suele empeorar las molestias.

Si con estas medidas no se presenta alivio, se puede iniciar tratamiento farmacológico.

El tratamiento de primera línea para pacientes con dismenorrea es la utilización de fármacos antiinflamatorios no esteroideos (AINEs). Este grupo de fármacos empezaron a ganar popularidad como el tratamiento más común de dismenorrea a partir de 1980, debido a su gran efecto sobre el dolor mediante bloqueo de la vía enzimática de la cicloxigenasa (COX), reduciendo los niveles periféricos de prostaglandinas (causantes del dolor en la dismenorrea, como se ha comentado previamente).

Teniendo en cuenta que la liberación de prostaglandinas en el flujo menstrual llega al máximo en las horas previas o en las primeras horas de iniciada la menstruación, los AINES deberían administrarse por 3 ó 4 días, iniciándose antes de la aparición de los síntomas.

Podemos consultar con un profesional sanitario, como el médico o el farmacéutico, para hacer un uso adecuado de AINES con el fin de aliviar el dolor propio de la dismenorrea. Éstos son medicamentos analgésicos que se utilizan para el tratamiento sintomático a corto plazo del dolor agudo de intensidad leve a moderada. La dosis necesaria del medicamento puede variar dependiendo del tipo, intensidad y duración del dolor. Se debe utilizar la dosis eficaz más baja durante el menor tiempo necesario para aliviar los síntomas. Además, podemos encontrar algunos de ellos en formato de sticks fáciles de transportar, para poder utilizaros en cualquier momento sin necesidad de requerir agua para su ingestión.

No dude en ponerle solución a sus dolores, tanto con medidas no farmacológicas como con el uso de este tipo de fármacos que resultan eficaces en el alivio de la sintomatología propia de la dismenorrea.


REFERENCIAS

  1. Morgan-Ortiz, F.; Morgan-Ruiz, F.V.; Báez-Barraza, J.; Quevedo- Castro, E. Dismenorrea: una revisión. Rev Med UAS. Enero-Marzo 2015; 5(1): 29-41. [Acceso: 08 de octubre de 2024]. Disponible en: https://hospital.uas.edu.mx/revmeduas/pdf/v5/n1/dismenorrea.pdf
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  3. Rodríguez Jiménez, M. J. Dolor menstrual en la adolescencia. Guía de Algoritmos en Pediatría de Atención primaria. [Acceso: 03 de octubre de 2024]. Disponible en: https://algoritmos.aepap.org/adjuntos/dolor_menstrual.pdf
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  5. Guía de derivación de patología ginecológica en la infancia y adolescencia (<15 años) desde atención primaria. Complejo Hospitalario Universitario Insular – Materno Infantil. Gerencia de Atención Primaria Área de Salud de Gran Canaria.  Dirección General de Programas Asistenciales. [Acceso: 08 de octubre de 2024]. Disponible en: https://www.sepexpal.org/wp-content/uploads/2021/10/Guía-Ginecología.pdf
  6. Amaya Mosquera, G. Dismenorrea. XIX Curso de Actualización en Ginecología y Obstetricia. Universidad de Antioquía. [Acceso: 08 de octubre de 2024]. Disponible en: https://revistas.udea.edu.co/index.php/ginecologia_y_obstetricia/article/view/17549/15142
     
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